Aprendí a no tomarme nada
de manera personal.
Lo que digan de mi otras
personas es un reflejo de
su realidad, no de la mía.
La gente se pasa la vida hablando,
criticando, difamando y en realidad
están hablando sobre si misma.
Muchas veces, son conductas
que les llevan a omitir su realidad,
ven en otros lo que deben trabajar
en si mismo para mejorarse ya
que la persona que está contenta
o es feliz consigo misma,
no anda por la vida buscando
los fallos ajenos, no van escupiendo
mentiras ni bulos, tan solo
lo hacen por su baja autoestima
y el no estar satisfechas con
la vida que llevan.
Deberían de preocuparse en
arreglar sus asuntos y respetar
al prójimo. ¿Qué les importa
a ellas lo que haces, dices
dejas de hacer o dejas de decir?
Un poco más de amor propio
es lo que les falta.
Así que, ni caso a este tipo
de gente, que cada uno
haga el camino como desee
y oídos sordos.
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